El estado clínico del Papa se ha mantenido estable hoy; no ha necesitado ventilación mecánica no invasiva, sino sólo oxigenoterapia de alto flujo; está apirético. Dada la complejidad del cuadro clínico, el pronóstico sigue siendo reservado. Así consta en el Boletín. Esta mañana el Papa ha asistido a misa, junto a quienes le cuidan durante estos días de hospitalización, y después ha alternado reposo y oración. Hoy el Papa ha recibido la visita del cardenal secretario de Estado, Pietro Parolin, y de su sustituto, monseñor Edgar Peña Parra. Así lo informó el director de la Sala de Prensa del Vaticano, Matteo Bruni.
También hoy, por tercer domingo consecutivo, el Papa envió el texto escrito del Ángelus. «Os envío de nuevo estos pensamientos desde el hospital, donde, como sabéis, me encuentro desde hace varios días, acompañado por los médicos y el personal sanitario, a quienes agradezco la atención con la que me cuidan. Siento en mi corazón la ‘bendición’ que se esconde en la fragilidad, porque es precisamente en estos momentos cuando aprendemos aún más a confiar en el Señor; al mismo tiempo, doy gracias a Dios porque me da la oportunidad de compartir en cuerpo y espíritu la condición de tantas personas enfermas y que sufren», escribe el Papa Francisco.
En el texto del Ángelus, el Papa hace saber que estos días reza «sobre todo por la paz. Desde aquí la guerra parece aún más absurda. Recemos por la atormentada Ucrania, por Palestina, Israel, Líbano, Myanmar, Sudán, Kivu», es el llamamiento del Pontífice difundido por la oficina de prensa del Vaticano.