También conocido como el país del sol poniente, Marruecos es uno de los destinos más buscados para viajar invierno y hacer turismo. El bullicio de Casablanca, el cielo estrellado del desierto de Merzouga, el zoco de Marrakech o el encanto costero de Sidi Ifni (ciudad que perteneció a España hasta los años 60). Cultura, paisajes y tradiciones ancestrales a solo unas horas de Madrid (con vuelo directo) bañadas por un clima templado y acogedor.
La realidad es que en Marruecos abundan los lugares que descubrir y disfrutar; incluidos aquellos menos conocidos que se escapan del clásico circuito turístico. Entre ellos destaca una preciosa ciudad costera que, para muchos, respira la esencia de la isla griega más famosa, Santorini. Con ella comparte el buen tiempo, las fachadas blancas y azules y las increíbles vistas al mar. El destino estrella esta temporada de viajes es Esauira y te contamos por qué.
¿Vale la pena visitar Essaouira, Marruecos?
La respuesta es sí: esta ciudad de la costa atlántica de Marruecos destaca por el encanto de su skyline de casas blancas y azules, que le valió el título de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco (desde 2001). Una joya a orillas del Atlántico que recomendados descubrir contratando una excursión a Essaouira desde Marrakech para entender por qué la ciudad ha enamorado a personajes famosos como Orson Welles o Jimi Hendrix.
Una propuesta de día (también en formato privado) muy interesante para conocer la Perla del Atlántico y visitar, entre otros, su fortaleza, el puerto pesquero, la laberíntica Medina, su interminable playa y su gastronomía marinera.
Aunque, si se tiene pensado pasar más de una jornada, además de empaparse de la cultura de su gente y pasear sus calles hasta perderse, hay otras actividades que merecen (y mucho) la pena. Por ejemplo, el tour en quad por Esauira es uno de los más populares: desde la aldea de Diabat, se puede recorrer las playas y dunas y descubrir las ruinas del Bordj El Berod, una antigua torre de vigilancia. Opción que puede combinarse con una excursión en camello.
Opciones fuera de la ciudad que, por supuesto, hay que combinar con las experiencias más auténticas. Entre ellas, un tour por un mercado bereber sumado a una visita a una cooperativa de argán, perfecto para empaparse de la autenticidad de la vida local, mientras los habitantes realizan sus compras y se reúnen en un ambiente amigable y familiar. También, merece la pena hacer una excursión por el mercado de Had Draa con degustación: el más grande de la región.
Y, si aún queda tiempo, muy recomendable asistir a una clase de cocina marroquí en una aldea tradicional, Haha Hills. ¿Y qué se preparará? Pan bereber, cuscús y tajín de verduras y carne de cabra con especias marroquíes que, después, se desgustáran.
Chauen o Agadir, otros destinos turísticos de Marruecos
Aunque el encanto marinero de Esaouira es ideal para escapar del invierno y disfrutar del puente de noviembre o de la Constitución, no es la única ciudad de Marruecos fuera del circuito de las grandes urbes que merece la pena visitar. Chauen, localidad situada en la ladera de las montañas del Rif, es una de ellas: denominada ‘el pueblo azul de Marruecos‘, es ideal para recorrer en un par de días y empaparse de la cultura del interior del país, al tiempo que se recorren sus angostas calles de color.
Un destino que merece la pena considerar si vamos a viajar a Marruecos y al que se une Agadir: ciudad ubicada en las laderas de las montañas Anti-Atlas y a orillas del Atlántico. La mezquita Mohamed V, la Kasbah, la Medina o los Jardines de Olhao son algunos de los monumentos característicos de la localidad que merece la pena visitar para descubrirla.
Un viaje organizado a Marruecos
Marruecos es el destino ideal para viajeros en busca de una experiencia inolvidable, pero muchos de ellos prefieren descubrirlo de la mano de guías locales que les enseñen a exprimir los muchos encantos culturales, arquitectónicos o de ocio del país africano. Por eso, cada vez hay más búsquedas de ideas de viajes organizados a Marruecos.
Entre los circuitos cerrados, es popular la ruta Marrakech, Atlas, Desierto y Fez que organiza Evaneos. Se trata de un viaje de siete días, ideal para descubrir lo imprescindible, si no tenemos mucho tiempo. Explorar los zocos y monumentos históricos de Marrakech; cruzar el Alto Atlas y visitar pueblos bereberes y kasbahs; disfrutar de un paseo en dromedario y noche en el desierto; visitar azucareras de Fez, curtidores y la Universidad Al Qaraouine; y, por supuesto, hacer una parada en un hammam para finalizar el viaje con una experiencia relajante.
Menos días se necesitan aún para realizar otro de los viajes organizados que propone Evaneos: el circuito para descubrir el encanto de las Ciudades Imperiales, zocos y medinas se realiza en seis días. Con ayuda de un guía local, se podrá descubrir la tranquilidad y belleza de Rabat; visitar las puertas y el mausoleo de Meknes; explorar las ruinas romanas de Volubilis con guía; recorrer los zocos y madrasas de Fez; y admirar la Plaza Jemaa el-Fna en Marrakech. ¿Se puede pedir más?
Menos días exigen los circuitos por Marruecos organizados por El Corte Inglés: dependiendo del tiempo del que se disponga y del presupuesto para la ocasión, se puede disfrutar desde 400 euros fantásticas experiencias. Por ejemplo, una escapada al Atlas desde la Costa del Sol viajando en ferry para descubrir Rabat, Fez y Chefchaouen.
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