La cesta de la compra volvió a encarecerse en febrero por quinto mes consecutivo empujada por la factura de la luz. El IPC subió el mes pasado cuatro décimas con respecto a enero hasta situarse la tasa anual en el 3%, su nivel más alto desde junio, confirmando el avance publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE) hace solo unas semanas.
Precisamente, desde el pasado 1 de enero, el IVA de la electricidad volvió a situarse en el 21%, frente al tipo del 10% que se estuvo aplicando hasta el 31 de diciembre del año pasado, dentro del paquete de medidas anticrisis que se aprobaron en respuesta a la crisis energética e inflacionaria. Así, el grupo de vivienda elevó dos puntos su tasa interanual en febrero, hasta el 9,8%.
Los datos que ha hecho públicos este viernes el organismo estadístico confirman que la inflación subyacente, que excluye de su cálculo los alimentos frescos y la energía por ser más volátiles, siguió reduciéndose en febrero, dos décimas, y se situó en el 2,2%, su nivel más bajo desde hace más de tres años.
Al mimo tiempo, los carburantes y lubricantes para vehículos personales influyeron a la baja en la inflación de febrero, al subir sus precios menos que en igual mes de 2024. Esto supuso que el grupo de transporte redujese un punto su tasa interanual, hasta el 0,3%.
Por comunidades autónomas, el IPC registró tasas anuales positivas en todas en febrero, siendo la más elevada la de Baleares (3,6%) y la más baja la de Canarias (2,2%). El INE ha confirmado que el IPC armonizado, que es la referencia que Eurostat toma para poder hacer sus comparaciones entre países, se situó en el 2,9%, manteniéndose con respecto al mes anterior.
En un contexto de incertidumbre internacional, «España sigue manteniendo el mayor crecimiento entre las principales economías de la zona euro, que está siendo compatible con una moderación de los precios y las ganancias de poder adquisitivo de los ciudadanos», señalan fuentes del Ministerio de Economía.