La Comisión Europea ha presentado su Estrategia de Preparación de la Unión, un ambicioso plan para mejorar la resiliencia ciudadana ante emergencias como desastres naturales, ciberataques o crisis climáticas. Entre sus medidas clave destaca la recomendación de que cada hogar cuente con un kit de supervivencia que garantice al menos 72 horas de autonomía sin ayuda externa.
Pero, ¿cómo se preparan otros países ante situaciones de emergencia? Tal y como se recoge en un artículo del diario ABC, naciones como Japón, Francia o los países nórdicos llevan años aplicando medidas similares, con kits diseñados específicamente para cada riesgo. Desde mochilas equipadas para terremotos en Japón hasta planes de abastecimiento en Finlandia, la preparación ante crisis varía según cada cultura y amenaza.
Similitudes y diferencias entre estos kits
Los kits de supervivencia recomendados por los distintos países europeos y Japón comparten algunas similitudes fundamentales, aunque también presentan diferencias notables, a menudo influenciadas por los riesgos específicos que cada país considera más probables.
Similitudes principales:
● Elementos básicos de subsistencia: la mayoría de los países europeos y Japón recomiendan incluir en los kits de supervivencia agua, alimentos no perecederos, y un botiquín de primeros auxilios y medicamentos. Estos son considerados esenciales para la supervivencia básica en cualquier tipo de emergencia.
● Fuente de luz: una linterna (a menudo recargable o con manivela) y/o velas con cerillas o un mechero son elementos comunes en las recomendaciones de Bélgica, Francia, Japón y Noruega.
● Medio de comunicación: una radio a pilas (con pilas de repuesto) es aconsejada por Francia y Japón, y una radio a pilar por Bélgica, para poder mantenerse informado en caso de interrupción de las comunicaciones habituales.
● Herramienta multiusos: una navaja (a menudo especificándose una navaja suiza) se menciona en las guías de Bélgica, Francia y Japón.
● Preparación ante múltiples amenazas: aunque con diferente énfasis, muchos países europeos (Noruega, Bélgica, Francia) reconocen la posibilidad de diversos riesgos como desastres naturales, problemas técnicos, terrorismo o incluso conflictos armados, similar a cómo Japón considera tanto desastres naturales como otros tipos de catástrofes.
● Énfasis en la autonomía: varios países, como Finlandia y Noruega, aconsejan tener suficientes provisiones para mantenerse de forma autónoma durante un periodo determinado (una semana en el caso de Finlandia y Noruega para ciertos elementos), para que las autoridades puedan centrarse en quienes más lo necesiten. La Unión Europea también ha pedido a sus ciudadanos hacer acopio para sobrevivir al menos 72 horas.
Diferencias principales:
● Foco en el tipo de amenaza: Japón centra sus recomendaciones fundamentalmente en desastres naturales como terremotos y tsunamis. En contraste, países como Finlandia y Suecia hacen hincapié en la preparación ante conflictos armados, dada su historia y la situación geopolítica. Esto se refleja en la inclusión de elementos específicos como las tabletas de yodo recomendadas en Finlandia para un posible ataque nuclear.
● Alimentos específicos: si bien la categoría de alimentos no perecederos es común, los ejemplos concretos varían. Suecia sugiere alimentos energéticos y altos en grasas como el pesto, tomates secados al sol en aceite y mantequilla de cacahuete, mientras que Japón menciona comida enlatada, patatas fritas, cacahuetes de arroz y sobres de sopa en polvo.
● Artículos adicionales específicos por país: Suecia destaca la importancia de tener comida para mascotas y recuerda la obligación de servir en la «defensa total» del Estado para ciudadanos entre 16 y 70 años. Finlandia subraya la preparación histórica del país ante la amenaza de guerra y la función de los reclutas en caso de conflicto. Noruega especifica la cantidad de agua potable a almacenar (alrededor de 20 litros por persona para una semana) y la importancia de tener ropa de abrigo, mantas y sacos de dormir. También aconseja tener conocimientos básicos de primeros auxilios. Bélgica incluye un cargador para el móvil o una batería externa, documentos importantes, una lista de verificación de evacuación. Francia recomienda tener gafas de ver, dinero en efectivo, fotocopias de los documentos esenciales y juegos de mesa para pasar el tiempo. Luego, Japón añade productos de higiene femenina, guantes y una cuerda de cinco metros a su lista, reflejando una perspectiva más amplia de las necesidades en una emergencia prolongada.
● Métodos de difusión de la información: Suecia distribuyó folletos por todos los hogares, Finlandia publicó una guía online, mientras que otros países mencionan la elaboración de documentos o la modificación de los existentes.
En resumen, existe un consenso general en los elementos básicos para la supervivencia, pero las diferencias en los kits recomendados por los distintos países europeos y Japón reflejan las prioridades y los riesgos específicos que cada nación considera más relevantes para su población. Los países europeos, especialmente los nórdicos, parecen tener una mayor conciencia de la posibilidad de conflictos armados en sus recomendaciones, mientras que Japón se centra más en la preparación para desastres naturales.