«Comienza el juego«, así de claro fue Ion Aramendi durante la noche del domingo, en el estreno de los debates de Gran Hermano. El presentador se encargó de dar las primeras pautas a Luis y Violeta, tras la revelación del secreto de las mellizas en la casa secreta.
Luis y Violeta tenían a alguien en común en la casa oficial: a Nerea, novia del chico y examiga de la rubia. El motivo de la pelea fue que cuando a Nerea le gustaba Luis, supuestamente, Violeta estaba manteniendo relaciones con él.
Sabiendo los precedentes, y que Nerea no tiene ni idea de que Luis y Violeta están concursando, las indicaciones de Ion Aramendi fueron más complicadas: «Os mudaréis a la casa grande, pero con identidades falsas que debéis mantener y que nadie descubra».
«Pero, ¿y Nerea? Si me va a comer a besos cuando me vea», se quejó él. «Eso es cosa vuestra», decía el presentador. «Tenéis que inventaros un nombre y una relación con vínculo entre vosotros«, les indicó. «Si os descubren, las consecuencias serán fatales», concluyó.
Tras pensarlo, Violeta se decantó por el nombre de Ainara, y Luis, por Diego. «Hemos pensado que seremos amigos del instituto«, transmitió Violeta. Eso sí, contarían con la ayuda de Laura Pérez, que era la única que conocía la existencia de la otra casa.
Definición de 'conversación de besugos' 😂 #GHDBT1 #GH8S pic.twitter.com/hQbr9BgMSD
— Gran Hermano (@ghoficial) September 8, 2024
«Sé quiénes son, quién es él y lo que han tenido», aseguró después de que se presentaran con los nombres falsos. «Tú serás su cómplice», le ordenó Aramendi. «Está chulo el juego, pero eres un poco cabrón», se reía la hija de María José Galera. No será hasta el martes cuando entren en la casa.