El Pentágono informó este jueves sobre el inicio de una indagación acerca del uso por parte del Secretario de Defensa, Pete Hegseth, de Signal, una aplicación de mensajería de texto no clasificada, para coordinar el ataque estadounidense del 15 de marzo contra los hutíes de Yemen. Este incidente, conocido como el caso Signalgate, involucra al gabinete de Donald Trump, que utilizó un entorno digital abierto para compartir información, y en el que participaba un periodista en el grupo.
“El propósito de esta evaluación es determinar en qué medida el Secretario de Defensa y otros oficiales del Departamento de Defensa respetaron las políticas y procedimientos de la institución para el uso de una aplicación de mensajería comercial en temas oficiales”, explicó Steven Stebbins, Inspector General interino del Pentágono, en un comunicado.
El Pentágono informó este jueves sobre el inicio de una indagatoria respecto al uso por parte del Secretario de Defensa, Pete Hegseth, de Signal, una aplicación de mensajería de texto no clasificada, para coordinar el ataque del 15 de marzo contra los hutíes de Yemen. Este incidente, ya conocido como el caso Signalgate, involucra al gabinete de Donald Trump, que utilizó una plataforma digital abierta para compartir información, y en la que participaba un periodista dentro del grupo.
“El propósito de esta revisión es determinar en qué medida el Secretario de Defensa y otros miembros del Departamento de Defensa siguieron las políticas y protocolos establecidos para el uso de una aplicación comercial de mensajería en asuntos oficiales”, explicó Steven Stebbins, Inspector General interino del Pentágono, en un comunicado.
El dilema de Trump: por qué no puede destituir a Waltz después de incluir a un periodista en un grupo altamente confidencial. Mientras tanto, la Casa Blanca, que hasta ahora había sostenido que el Signalgate era un «tema resuelto», despidió este jueves a tres empleados del Consejo de Seguridad Nacional, organismo encargado de asuntos militares y exteriores, que fue el origen del escándalo.
Los tres empleados despedidos son Brian Walsh, director de inteligencia; Thomas Boodry, director sénior de asuntos legislativos, y David Feith, director sénior encargado de tecnología y seguridad nacional, según informó la cadena CNN citando fuentes cercanas al caso. El NSC es un organismo subordinado a la oficina presidencial de EE. UU., con funciones de asesoramiento y coordinación estratégica en cuestiones de política exterior y seguridad nacional, con el consejero de Seguridad Nacional al mando, un puesto que Donald Trump otorgó, tras su victoria electoral, al exmilitar y excongresista de Florida Mike Waltz.